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Trabajar desde casa: Una guía para controlar la ansiedad

Guía para controlar la ansiedad trabajando desde casa

Nuestro día a día ha cambiado mucho en 2020 y algunos todavía estamos acostumbrándonos. Es normal que tantos cambios y malas noticias constantes nos preocupen y nos generen cierta ansiedad.

Son muchas las empresas que, si su actividad lo permite, recomiendan a sus trabajadores trabajar desde casa para frenar la propagación del Covid-19. En Vision Direct hemos decidido encuestar a 2000 trabajadores de oficina para ver cómo les está afectando pasar tanto tiempo (de trabajo y ocio) en casa.

Los resultados de la encuesta arrojan que el trabajo en remoto continuado resulta desalentador para muchos profesionales: 4 de cada 10 trabajadores de oficina españoles están preocupados por su salud mental y su bienestar futuro.

Para ayudar a los trabajadores a lidiar con esta situación, hemos colaborado con la Dra. Becky Spelman, psicóloga experta en terapia cognitivo-conductual, y hemos creado una guía con recomendaciones sobre cómo controlar la ansiedad y mantener a raya las preocupaciones. Además, nuestro optometrista interno, Yannick Roth, ha compartido con nosotros sus consejos para cuidar de la salud ocular en estos momentos en los que pasamos largas horas frente a pantallas.

Ilustración de una mujer meditando en su escritorio de trabajo con una copa de vino

Sigue la regla 20-20-20

Tal y como cuenta Yannick Roth, óptico y promotor de negocio de Vision Direct: "Las pantallas generan fatiga visual digital: nos hacen parpadear menos y peor, por lo que si pasamos mucho tiempo frente a ellas es importante incorporar nuevas rutinas".

Un buen consejo es seguir la regla 20-20-20: cada 20 minutos aparta la vista de la pantalla durante 20 segundos hacia algo que esté a 20 pies de distancia (unos 6 metros). Esto da a tus ojos el descanso que tanto necesitan, a la vez que previene los dolores de cabeza, la visión borrosa y la sequedad ocular.

No dejes de lado tu vida social

Trabajar desde casa puede resultar muy solitario y agobiante. Por eso es primordial mantener el contacto con amigos y colegas. Sabemos que lo último que necesitas al final de un duro día de trabajo es la enésima videollamada o hablar por teléfono, pero es recomendable hacer un esfuerzo por seguir en contacto con aquellos que te importan.

Si vives con otras personas que también trabajen desde casa, como un cónyuge o compañero de piso, estableced algunas reglas básicas para sobrellevar la situación: por ejemplo, habilitad una habitación en particular para las llamadas telefónicas y así no molestar al otro, o acordad una hora para comer o salir a dar un paseo juntos.

Ilustración de un escritorio con una pantalla de ordenador, una taza y lápices

Delimita las zonas y sus usos

La Dra. Spellman explica: "Es difícil trazar una línea de separación entre la vida laboral y familiar cuando prácticamente todo se lleva a cabo bajo un mismo techo, por lo que resulta muy importante delimitar con claridad los distintos usos de cada zona". Algo que marca la diferencia es tener un espacio dedicado sólo al trabajo: si tu casa es lo suficientemente grande, una habitación libre o un trastero se puede reutilizar como oficina. Si vives en un pequeño apartamento tipo estudio, puedes designar un escritorio o mesa en particular.

Recuerda mantener tu espacio de trabajo razonablemente ordenado. Como añade Spellman: "Todos tenemos un nivel de tolerancia distinto al desorden, pero debemos asegurarnos de no sobrepasarlo nunca, ya que esto nos termina afectando. Al final de cada jornada laboral, retira las tazas de café vacías, ordena los papeles y apaga el ordenador portátil."

Ilustración de un hombre tomándose un descanso frente a su ordenador de trabajo

No te saltes las pausas

Programa descansos regulares e intenta que consistan en tomar el aire y hacer ejercicio. El estudio nos ha demostrado que interactuar con la naturaleza tiene un efecto profundamente positivo para la salud mental. Si puedes dar un paseo por un parque o el campo, genial. Si no puedes, incluso una caminata rápida alrededor de tu edificio para tomar un poco de aire fresco y sentir la luz del sol en la cara te hará bien.

Considera incorporar otro tipo de actividades en tu día a día, como yoga o meditación. Hay miles de vídeos en YouTube si te sientes un poco perdido al hacerlo por tu cuenta. Esto te ayudará a relajarte, desestresarte y prevenir el dolor de espalda.

Vigila tu alimentación

Cuidado con tu consumo de alcohol. El estrés y el aburrimiento pueden derivar en un consumo excesivo de alcohol. Al trabajar desde casa, puede resultar muy tentador terminar la noche con una copa. No pasa nada por tomar algo de vez en cuando, pero vigila bien la cantidad y la frecuencia con la que bebes. Evita hacerlo a menudo y ten en cuenta que existen muy buenas alternativas de bebidas sin alcohol.

Tener la nevera tan a mano puede ser una tentación difícil de combatir, por eso el aumento de peso es un peligro potencial para todos los que trabajan desde casa. Es importante evitar comprar snacks y comida poco saludable, como golosinas, y estar siempre provistos de tentempiés saludables, como zanahorias, uvas y mandarinas.

Mujer trabajando con un ordenador portátil recostada frente a la ventana

Cuida tu estado de ánimo

Por muy tentador que pueda ser trabajar en pijama o ponerte unos pantalones de yoga usados (¿quién no lo ha hecho alguna vez?), es mejor para tu salud mental darte una ducha y vestirte con ropa de calle antes de trabajar.

No hace falta que te pongas un traje, basta con ropa limpia y cómoda. Te sentirás más profesional, productivo y centrado si haces este mínimo esfuerzo por la mañana. Si no tienes plantas en casa, considera comprar una o dos. Una planta verde y viva es fantástica para el aire, el estado de ánimo y crear una sensación de hogar. ¡Las suculentas son ideales para jardineros primerizos!