El objetivo del Día Mundial de la Diabetes de este año es promover la importancia de un acceso asequible y en condiciones de igualdad para todas las mujeres en riesgo, o que viven con diabetes, a las medicinas y tecnologías necesarias para tratarlas.
Muchas personas no se dan cuentan del papel tan importante que tienen los ojos en el diagnóstico de la diabetes tipo 2. La visión borrosa es un síntoma que puede indicar que la persona puede haber desarrollado diabetes y que, cuando se examina la visión como parte de una prueba ocular de rutina, el óptico revisará los ojos en busca de esos síntomas.
La diabetes se presenta cuando la glucosa (el azúcar) no puede introducirse en las células para convertirse en combustible, lo que significa que queda una cantidad elevada en el cuerpo. Si no se trata, puede ocasionar graves complicaciones de salud. Hay dos tipos de diabetes:
La insulina es la hormona producida por el páncreas y que mueve la glucosa a nuestras células para convertirla en combustible. Si hay algún problema con ella nuestro cuerpo empieza a luchar.
Una de las razones por las cuales las mujeres son el foco principal de la campaña de este año es que los tradicionales roles de género y las dinámicas de poder en la sociedad han dejado a las mujeres vulnerables a la falta de diagnóstico, particularmente en los países en proceso de desarrollo. Las desigualdades, como la falta de educación o el acceso a una buena nutrición, ponen a todo el mundo en riesgo.
No solo las desventajas socioeconómicas son las que aumentan la vulnerabilidad a la diabetes. Los estilos de vida poco saludables son un elemento fundamental en el desarrollo de esta condición. Afortunadamente, la diabetes se puede controlar si se detecta temprano, pero la falta de un diagnóstico podría desarrollar más complicaciones en tu salud. Esto significa que hacer chequeos rutinarios donde puedas detectar los síntomas es importante, y un examen ocular es un buen ejemplo de ello.
Existen varias afecciones oculares que pueden conducir a la diabetes si no se tratan. La retinopatía diabética es la causa más común de pérdida de visión entre las personas con diabetes y es la principal causa de ceguera entre los adultos. Esta condición también conduce al edema macular diabético, una hinchazón del área de la retina llamada mácula.
Los adultos con diabetes tienen un 4% más de probabilidades de desarrollar cataratas y es más probable que ocurra a una edad más temprana de lo que la tendría una persona que no tenga la enfermedad. La diabetes también duplica el riesgo del glaucoma, y ambos problemas oculares aumentan la probabilidad de ceguera o pérdida considerable de la visión.
Afortunadamente, puedes prevenir la diabetes tipo 2 con algunos cambios sencillos en tu estilo de vida. En primer lugar, si pasas largos periodos de tiempo sin hacerte pruebas de la vista, debes hacer chequeos regulares cada dos años. Si usas lentillas o gafas, los exámenes oculares son esenciales para garantizar que son cómodas y que tienes la graduación necesaria, pero también te ayudan a detectar la diabetes y otras afecciones que puedan detectarse a través de los ojos.
Una dieta saludable y realizar ejercicio semanal es fundamental para prevenir la aparición de diabetes tipo 2. Comer alimentos con alto contenido en fibra y cambiar la pasta y el arroz blanco por el integral son dos formas en las que puedes mejorar tu dieta. No necesitas ejercitarte intensamente, 30 minutos al día caminando de forma ligera son suficientes para evitar la diabetes.
Si no te has examinado de la vista en los 2 últimos años, anótalo en la lista de cosas para hacer. Además de ser importante para la vista, pueden detectar afecciones de manera temprana, lo que significa que podrías tratar la diabetes antes de que comenzara a tener un impacto grave en tu salud.
