Hay varias causas que pueden provocar una sensación de escozor o ardor. Los causantes pueden provenir del entorno de tu casa, como el uso de un humidificador, un ventilador o el aire acondicionado. Las sustancias químicas de los productos de limpieza, el maquillaje, las cremas hidratantes, la crema solar, los geles, el jabón o el cloro de la piscina también pueden ser causas del picor.

El picor de ojos también puede estar causado por factores ambientales y alérgenos externos, como el polvo, el humo, los ácaros, el pelo de los animales o el moho. Los cambios estacionales pueden ser épocas más conflictivas para personas alérgicas, ya que pueden sufrir picazón ocular. Uno de los síntomas que pueden padecer las personas con alergia es la conjuntivitis alérgica.

Si tienes una gripe o un resfriado, el ardor de los ojos puede agudizarse. Lo mismo ocurrirá si experimentas rinitis alérgica, en estos casos, se produce una inflamación de la conjuntiva que puede dar lugar a escozor. A veces, el picor de ojos puede ser un signo de afección ocular más grave. Estas afecciones pueden ser:

• Rosacea ocular

• Ojos seco crónico

• Ojos rosado

• Blefaritis (inflamación de los párpados)

• Conjuntivitis bacteriana/ alérgica

Si experimentas una secreción ocular, esto podría significar que tienes una infección o podrías estar sufriendo alergia. El ardor continuo, independientemente de la causa, significa que debes acudir a tu óptico u oftalmólogo.

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Picor de ojos y lentillas