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¿Qué es el síndrome visual informático? Síntomas y causas

Chica frotando ojos

Hoy en día estamos rodeados de tecnología, trabajamos delante del ordenador, pasamos nuestro tiempo libre delante de la televisión, teléfonos móviles… ¿Son las pantallas las que nos persiguen o es que nosotros no sabemos vivir sin ellas?

En este mundo digital en el que los dispositivos electrónicos tienen un lugar protagonista en nuestras vidas, es importante prestar especial atención a nuestra salud visual, ya que nuestros ojos pueden verse seriamente afectados por esta gran exposición.

¡Ojo con los maratones de Netflix y las horas y horas repasando stories en Instagram! Ten cuidado con estas sesiones interminables de pantalla porque… ¡Pueden traer cola! Una de las principales consecuencias es el síndrome visual informático o fatiga visual.

¿Qué es el síndrome visual informático?

Ergonomía en el trabajo

El síndrome visual informático (SVI) también conocido como fatiga visual digital o síndrome visual digital (SVD) se produce como consecuencia del tiempo que invertimos delante de las pantallas. Mirar a una pantalla que emite una luz intensa, teniendo además que enfocar y desenfocar a diferentes distancias, exige un esfuerzo acomodativo durante muchas horas seguidas. Además, la presencia de brillos y deslumbramientos derivados de las pantallas puede ser dañino para tu salud ocular.

Pasar más de 3 horas diarias delante del teléfono, el ordenador o la tablet es el tiempo establecido como suficiente para generar alteraciones oculares. Muchas personas ya sobrepasan este límite solo durante sus horas de trabajo, por lo que si a eso, le sumamos el tiempo de ocio delante de una pantalla, los cálculos son del todo preocupantes. En definitiva, nuestro estilo de vida gira en torno al uso de pantallas y esto puede provocar serios problemas visuales.

Síntomas del síndrome visual informático

  1. Ojos rojos. Mantener los ojos abiertos mirando a un foco de luz intensa, produce una inflamación de los vasos sanguíneos y la aparición del enrojecimiento y picor.
  2. Fatiga ocular. Exigir a nuestros ojos tanto esfuerzo prolongado sin descanso, puede derivar a tener visión borrosa e irritación ocular.
  3. Ojo seco. La sequedad ocular es uno de los síntomas más comunes del SVI, al estar concentrados en la pantalla, a veces incluso nos olvidamos de parpadear y esto genera mayor sequedad ocular y lagrimeo.
  4. Dolor de cabeza. La luz intensa y la presión a la que nuestros ojos están sometidos de forma ininterrumpida, puede dar lugar a cefaleas y dolor de cabeza durante y después de la actividad delante de la pantalla.
  5. Fotofobia. Otra de las consecuencias del SVI es el desarrollo de la hipersensibilidad a la luz, ya sea natural o artificial.
  6. Mareos. El sobre esfuerzo al que nos sometemos y los continuos estímulos a los que nos exponemos delante de una pantalla pueden generar una sensación de vértigo o incluso visión doble.

Consejos para evitar la fatiga visual

Somos conscientes de que reducir el uso de las pantallas es casi imposible. Para muchos de vosotros este tiempo forma parte de vuestra actividad laboral y entendemos que disminuirlo es complicado. Pero sí que existen pequeños hábitos que puedes adoptar para reducir el impacto en tus ojos y evitar molestias oculares:

Mapa fatiga visual
  1. Distancia apropiada del ordenador. Cuando se trata de salud visual, la ergonomía tiene un papel fundamental. La pantalla o el monitor de tu ordenador debe situarse a una distancia de entre 50 y 65 cm de ti. Además, debe estar más o menos a la altura de tus ojos, así evitarás también problemas cervicales. El monitor y el teclado deben de encontrarse posicionados en línea recta contigo.
  2. Pantalla con buena resolución. Trabajar con una pantalla que tenga buena resolución y sea de buena calidad es necesario para evitar el sobre esfuerzo ocular.
  3. Regla 20-20. Práctica esta regla cada 20 minutos. Debes de hacer descansos de 20 segundos para mirar a un objeto situado a 6 metros de distancia. De esta forma le estarás dando a tus ojos un respiro y podrás volver a tu actividad con las pilas cargadas.
  4. Uso de lágrimas artificiales. Tener unas lágrimas artificiales a mano es imprescindible para combatir muchos de los síntomas del SVI, nuestras lágrimas artificiales everclear son perfectas para favorecer la lubricación ocular.
  5. Postura correcta. Sentarte con la espalda recta favoreciendo una buena postura de tu cuerpo es esencial para evitar tener dolor de cuello. Además, es importante que hagas descansos y te levantes cada cierto tiempo para estirar las piernas y darle a tu columna vertebral un descanso.
  6. Parpadeo voluntario. Cuando estamos concentrados no nos damos cuenta, pero muchas veces nos olvidamos de parpadear. Forzarnos al parpadeo es importante para evitar la sequedad ocular y fortalecer los músculos del ojo.
  7. Visita a tu oftalmólogo. En casos más severos en los que los síntomas persisten de manera grave y prolongada en el tiempo, debes de pedir una cita médica.
  8. Hazte un examen de la vista. Si pasas mucho tiempo frente a las pantallas y encima no controlas el estado en el que se encuentran tus ojos las consecuencias pueden ser todavía peores. Visita a tu optometrista y elige las lentillas más adecuadas para tus ojos.
  9. Dedica tu tiempo libre a hacer detox de pantallas. Sabemos que después de un largo día de trabajo encender la tele y ver el último capítulo de tu serie favorita del momento es muy tentador. Poner la mente en blanco mientras scrolleas en Tik tok viendo gatitos adorables y gente haciendo bailes imposibles es una buena forma de desconectar, y como estas, hay un montón de actividades que implican un dispositivo electrónico de por medio. Pero, ¿qué tal si sales a la calle, te tomas un café con un amigo, haces algo de deporte, te lees un buen libro mientras disfrutas de una taza de té o simplemente das un paseo? Dale a tu cuerpo y tus ojos lo que de verdad necesitas.