Los párpados cumplen una función vital: limpian los ojos y los mantienen hidratados. Pero, a la vez, pueden delatar qué estamos pensando, qué sentimos e incluso qué tramamos. Para que entiendas qué ve la gente al mirarte a los ojos, hemos creado un juego con el que puedes medir la frecuencia con la que parpadeas. Aunque, claro, tal vez no sepas qué información aporta a los demás la velocidad a la que parpadeas. Si es así, sigue leyendo para descubrir qué secretos estás revelando al mundo de forma inconsciente.
¿Eres de esas personas que, cuando van a aparcar, bajan el volumen de la radio del coche? Es normal: cuando estamos muy concentrados en algo, como un proyecto importante, el cerebro tiende a centrar toda su capacidad cognitiva en dicha tarea. En esos momentos, nuestro cuerpo se olvida de que tiene que parpadear y, como consecuencia, el número de pestañeos cae en picado, hasta los cuatro por minuto en algunos casos. Esto puede tener un impacto considerable en tu salud ocular e incluso afectar negativamente al resultado de la tarea que tienes entre manos.
Un ejemplo muy claro lo vemos en el famoso tiroteo de El bueno, el feo y el malo. Los protagonistas solo parpadean nueve veces entre los tres durante toda la escena. El Rubio, el personaje de Clint Eastwood, parpadea mucho más que el resto, lo que nos da a entender que está más seguro de sí mismo y sus capacidades. Por su lado, Sentencia, quien acaba muriendo en el tiroteo, es el que menos parpadea. Tal vez si Sentencia hubiera parpadeado un poco más, habría sobrevivido y se habría llevado el botín enterrado al final de la película. La moraleja de la historia está clara: si quieres conseguir tus objetivos, acuérdate de parpadear.
Tener la mente centrada en algo no es lo único que puede afectar a tu frecuencia de parpadeo. Al decir una mentira, también se parpadea menos. Esto se debe a la carga mental que supone mentir, que hace que tu cerebro preste menos atención a cuánto pestañea. En cambio, una vez dicha la mentira, los ojos empezarán a parpadear mucho para compensar. Piensa, por ejemplo, en el discurso que dio Bill Clinton al destaparse el escándalo con Monica Lewinsky. El expresidente estadounidense parpadeó después de pronunciar las palabras clave: “relaciones”, “sexuales”, “Lewinsky” y “nunca”. Que tras cada mentira parpadease para liberar estrés demuestra que le preocupaba resultar convincente. ¡Pero los ojos no engañan!
A veces, cuando estamos con la persona que nos gusta, no queremos que se note lo pillados que estamos. Pero, si quieres actuar normal delante de la persona que te gusta, debes prestar atención a la frecuencia de tu parpadeo. La velocidad a la que pestañeas puede denotar atracción, nerviosismo, excitación o aburrimiento, según el caso. Saberlo también te puede ser útil para averiguar si el sentimiento es mutuo. Si la otra persona parpadea mucho y, además de eso, tiene una postura cerrada y evita mirarte a los ojos, tenemos malas noticias...
¿Que qué cosas dañan la vista? Pues, lamentablemente, muchas más de lo que parece. Cada día, afrontamos situaciones que generan mucho estrés en nuestros pobres ojos. Para ayudarte a preservar tu salud ocular y que sigas sonriendo con la mirada, hemos recopilado una serie de consejos:
Cuidar bien de nuestros ojos es fundamental, y no podemos olvidarlo. Ni siquiera cuando estamos concentrados en una tarea importante o echándole miraditas a nuestra pareja. Con Vision Direct, puedes pedir tus lentillas más baratas por internet y ahorrarte complicaciones. Nosotros te las llevamos a casa, para que tú te centres en lo que de verdad te importa y no tengas que preocuparte por tu salud ocular.